El llamado de la selva
Bajo la luz de la luna
El chacal espera la ocasión
Sus ojos de fiera anhelan
Dar la estocada final
Hace mucho que no come
Y parece un saco de huesos
Presagia que pronto saciara
Ese voraz deseo que lo colma
Una vez fue un perro común
Y todo a su alcance tenia
Alimento, cariño y devoción
Eran monedas de todos los días
Una aciaga tarde todo cambio
Y la suerte le fue esquiva
En una oscura y fría tormenta
La desgracia mas terrible llego
Su amo murió de repente
Y se quedo solo en la cabaña
Pasaba el tiempo junto a el
Pero se dio cuenta que estaba solo
Después de días enteros
Y cuando ya no poseía fuerzas
Escucho a modo de aullidos
El llamado de la selva
Era el amanecer de una nueva vida
Que estaba mas allá del horizonte
Se irguió con esfuerzo y como pudo
Comenzó a caminar hacia el bosque
Una vez allí, sintió la energía
Y su cuerpo comenzó a vibrar
Sin dudas comenzó a correr
Y su alegría se hizo eterna
Hoy, ya no es mas dócil
La selva lo hizo rebelde e indomable
Perdió mucho peso y esta flaco
Pero sabe que el invierno termina
No muy lejos de allí
Lo espera su familia en el cubil
No debe ni puede fallar
Porque de el dependen sus vidas
El ciervo se alimenta sin parar
De las pocas hierbas que quedan
Pero tal vez, sea esta
La ultima cena que tenga
El viento no para de silbar
Y se mezcla con el abrazo mortal
De la furiosa necesidad
Que trae la funesta parca
Pronto saciara su vieja hambre
Y volverá a soñar como antes
Se subirá a la cumbre mas alta
Y aullara en señal de victoria
Es el ciclo inalterable de la vida
Donde unos mueren para que otros vivan
Cuando uno cree que todo termina
La aventura vuelve a comenzar
El paisaje se va aclarando
Por el amanecer que llega
Parece un lugar solitario
Pero hay dos ojos que acechan.