LA NENA, LA ROSA Y LA MARIPOSA
LA NENA TENÍA
UNA MARIPOSA,
Y EL AGUA CAÍA
SOBRE UNA ROSA.
LA MOJABA DESPACITO
SIN HACER NINGÚN RUIDITO,
Y A LA ROSA COLORIDA,
UN PÉTALO SE LE CAÍA.
SE DESLIZABA EN EL PASTO
COMO CARAMELO EN LA BOCA,
LA MARIPOSA SORPRENDIDA
A LA ROSA ELLA VEÍA.
OJITOS DE CIELO
ESOS OJITOS DE CIELO
ALUMBRABAN EN LA NOCHE,
COMO UNA ESTRELLA FUGÁZ;
SIN MENTIRAS NI REPROCHES.
ESOS OJITOS DE CIELO
MIRABAN A LA GENTE PASAR,
Y SORPRENDIDOS EN UN VUELO
EMPEZARON A LAGRIMEAR.
VIENTITO AZUL
CUANDO YO IBA CAMINANDO
POR LA CALLE DE ADOQUINES,
EL VIENTITO IBA CRUZANDO
CON PASITOS SALTARINES.
ME EMPUJABA DESPACITO,
CON SU LARGA COLA AZUL
Y HACIENDO UN RUIDITO
ME CUBRÌA CON SU TUL.
TIN – TI – LEABA EN EL AIRE
CON SUSPIROS DE COLORES,
CON SONRISAS TAN AMABLES
Y GUSTITO A MIL SABORES.
Luisina Romero Salusso (luisi-98@hotmail.com)
9 años, Ciudad de Río Cuarto. Córdoba. Argentina
4 de agosto del 2007