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Esa es la historia de una mujer enamorada que durante 25 años dedico su vida a un hombre al que consideraba bueno y honrado, cuando se entero de la verdad no pudo sobrellevarlo y dejo pasar los años sin penas ni alegrías, hasta que se fue de este mundo sin lograr poder olvidarla la gran tragedia de su vida
Después de haber pasado muchos años, Esperanza no podía pensar en ello sin sentirse terriblemente mal, no pasaba ni un solo día que no pensara en aquel 18 de mayo que la llamaron urgentemente para decirle que su marido le había dado un infarto y se lo llevaban con una ambulancia.
En su cabeza acudían todos los recuerdos los gritos las carreras y exclamaciones de todos sus vecinos y familiares, las prisas para llevarla al hospital (pasaban por su pensamiento como si fueran ráfagas de viento).
Al llegar al hospital y entrar en la habitación donde se encontraba su marido, recibió un gran sobresalto. Al lado del enfermo se encontraban dos mujeres de diferente edad llorando desesperadamente, en el primer momento no se fijo mucho, estaba loca de dolor y solo tuvo ojos para ver al hombre que estaba tendido en la cama debatiéndose con la muerte, se arrogo llorando encima de el con gran desconsuelo.
Poco a poco se fue calmando y empezó a pensar que hacían allí aquellas dos mujeres, (una casi una niña) ¡pobre Esperanza! que poco se imaginaba que lazos les unían a su esposo.
Después de recibir el primer impacto, empezó a pensar, y sin darle tiempo de nada se entero sin ninguna clase de delicadeza y brutalmente de quien eran, ¡Oh Dios como pudo resistirlo! Su marido un hombre considerado una buena persona! les había engañado a todos, empezando por ella con la que llevaba 25 años de casado. Esperanza se había tenido que enterar de su doble vida y que tenía una hija mientras este luchaba con la muerte.
José tenía otra mujer desde hacía muchos tiempo y una hija con 15 años, como empezó la cosa ni lo recordaba, amaba a su mujer sinceramente, pero….. Algunas veces la vida te juega una mala pasada y luego no puedes salirte de ella, a José le pasó algo así, y tuvo que mantenerlo en secreto durante mucho tiempo, pero al final todo se descubrió de la manera más simple.
Después de luchar varios días con la muerte, pasó el peligro y con el tiempo José se recupero del todo.
¿Que camino tomaría? Nadie lo sabia, incluso el mismo lo ignoraba, eso si, tenía que tomar una decisión lo mas pronto posible.
Entre las tres mujeres durante los días que siguieron después, no cruzaron entre ellas ni una sola palabra.
Ahora venia el momento de poner las cartas sobre la mesa y hablar cara a cara sin ocultar nada por muy complicado que fuera, y que la verdad se supiera.
No era fácil para José, tenia que pensar que iba hacer con su vida, después de esconderla durante tantos años, todo se había descubierto. (Nunca se puede tener una cosa tan delicada e importante sin que tarde o temprano se sepa) ¿Qué haría? Quería a las dos mujeres, no con la pasión y amor loco de la primera juventud ahora todo era más sosegado y tranquilo, Esperanza había sido y seria siempre el amor de su vida, pero por un momento de locura ahora tenía que renunciar a ella y pagar sus consecuencias.
Después de pensarlo algún tiempo se decidió por la madre de su hija, muy al fondo de su corazón sentía la necesidad de estar con Esperanza, pero al no tener hijos se encontró con la obligación de reconocer a su hija y darles sus apellidos.
Así fue como Esperanza se encontró sola y bastante peor que si la muerte le hubiese arrebatado a su marido, tuvo que aprender a vivir con ese gran dolor en su corazón y seguir adelante, sin poder olvidar nada hasta que la muerte se la llevo librándola de su sufrimiento.
Tenemos que disfrutar los momentos buenos de la vida, los malos vienen cuando menos las esperas.
Hay que vivir la vida con intensidad.
Poemas y relatos por María Teresa:
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