¡ Ya es Navidad ¡ .... villancicos, turron, panderetas, espumillón, árbol, belén, matasuegras , cenas , regalos etc... . Sin olvidar visitar a aquellos que queremos, pero por lo rápido que vivimos nos justificamos y tenemos un poco aparcados y olvidados.
Navidad. Palabra con connotacciones que no nos dejan indiferentes. De repente todos se empeñan en que hay que quererse y besarse sin venir a cuento. Paz, amor felicidad, generosidad , fraternidad. En tiempo navideño se lleva ser generoso aunque seamos de la cofradía de la virgen del puño ( cerrado, claro). Comidas familiares .Gente que nos resulta extraña, abundantes conflictos familiares dolorosos por herencias y posesiones a las que nadie es capaz de renunciar y a las que fácilmente entregamos nuestro corazón.
- “ Me han robado la herencia de mi madre, jamás lo perdonaré. Es que..... ¡ No hay derecho¡ ....” - Comidas de empresa, opulentas que acaban a las 8 de la tarde y nos dejan destrozados. Cenas a partir de la primera semana de diciembre con derecho a ligue. Todo menos el verdadero sentido. Afortunadamente somos incapaces de hacer algo “ porque toca”. No somos máquinas aunque estemos en la era de la informática. No se pueden enterrar odios, rencores y sufrimientos de un plumazo hay que digerir y sobre todo tener paciencia con nosotros mismos y olvidar.
El pasado está muerto, pero marca a fuego como si fuéramos una ganadería con solera ¡y como! .El subconsciente es mucho más peligroso de lo que nos imaginamos y puede conducir nuestra vida por senderos que no nos gustan, ni deseamos, ni nos imaginamos.
A María le ponía muy nerviosa la Navidad. No lo podía remediar. Pensaba que no tenía motivos para estar triste. La vida le sonreía. En el trabajo se sentía querida. Sus hijos estaban por ella. Su marido era un poco machista y gruñón pero ella ya le conoció siendo así. No se podía quejar, porque no le venía de nuevo. No ganaba mucho dinero pero nunca tenido grandes aspiraciones materiales. Con tener un coche normalito le bastaba.
Muchos amigos suyos decían era bastante “ rarita”. Una conocida comentaba - “ El que no tiene un Mercedes es que no tiene dinero para comprarlo. Dales a todos los que critican los cochazos pasta a mansaba y verás lo que se compran “ - Ella pensaba que su amiga estaba como una cabra. María lo había pasado muy mal afectivamente . Le costó mucho trabajo creer en el amor .Le gustaba que las cosas fueran bien, que todo estuviese en calma como una balsa. Sin novedades en el frente . Todo como muy encajonado sin posibilidad de cambio a peor, sino de mejora.
Cuando llegaba la primera semana de diciembre se ponía a llorar sin venir a cuento. Se serenaba cuando venían los niños del cole. No deseaba que la viesen tan echa polvo porque la freirían a preguntas. Su marido como iba a su bola apenas se daba cuenta . Ella procuraba por su parte ser muy discreta con su tristeza . El le había hecho algún comentario, pero ella para tirar balones fuera le había dicho “ bueno, tu ya sabes estoy así porque me tiene que bajar la regla“. El se tragaba la explicación sin cuestionarla de ningún modo . A María le costaba horrores pero no se permitía tener ataques de llanto delante de nadie, a veces se encerraba en su habitación y hubiese roto todo el mobiliario si luego no tuviese que dar explicaciones. A medida que pasaban los días se iba sintiendo peor , más cansada, desilusionada y más triste. . Le resultaba como una losa imposible de levantar. Todo le resultaba una carga: levantarse por la mañana de la cama, comprar los regalos, poner buena cara, felicitar a la gente que no te aporta nada. “¡ Que hipocresía, que asco¡ “ –pensaba-. Dejaba la compra de regalos para el último día, cuando no había más remedio . Iba siempre por los regalos a la hora de la comida. Pero últimamente la gente se había vuelto loca. En esos horarios todos iban a comprar porque pensaban que los grandes almacenes estarían vacíos.¡ Menudo chasco ¡ Se encontraba sin quererlo a compañeros de trabajo , y todos se preguntaban lo mismo para quedar bien. Somos gente educada – pensaba- . Todos tenían la misma idea genial de ir a comprar una hora que se supone no hay gente y todos se equivocaban.
Un día pensó porqué cambiaba de ánimo cuando ella era una persona bastante risueña . Intentaba luchar contra esto, pero era superior a sus fuerzas. . Cuando llegaba esta época procuraba distraerse. Ir a la biblioteca , ir a conciertos, relacionarse con las madres del cole, hacer relajación, apuntarse a bailar batuka para ver si desaparecía el stress. Cuando llegaba la noche todos los fantasmas que parecían olvidados aparecían nuevamente, mucho más poderosos. Apenas podía pegar ojo. Al día siguiente estaba destrozada. Las vecinas le saludaban , las que le tenían más confianza le espetaba ¡ menudo careto¡ ¿Te ha dado mala noche el niño?............ . A propósito ¡ Feliz Navidad¡
¿De donde le venia esto? .... de su niñez. No fue fácil. Sus padres siempre enfadados, por chorradas. A grito limpio. Se decían cosas muy dolorosas . Un escándalo para los vecinos . No se ponían de acuerdo en nada. Ni siquiera en la forma de poner la mesa el día de Navidad . Ella hace muchos años hubiera deseado desaparecer, no haber nacido. Que hubiesen prosperado, pero que no le echasen en cara sus errores y el que la vida no les tratase como se hubiesen imaginado. Cuando creció hubiese deseado ese día comer en otro sitio, aunque fuese en el comedor de transeuntes. Seguro que tenían una historia que contar , que compartir y se sentirían agradecidos. Habían pasado los años, logró entender muchas cosas y sobre todo consiguió muy poco a poco aceptar a sus seres queridos con toda su escandalosa humanidad. Nuestro egoismo nos lleva a hacer cosas que hacen daño a los demás. Tenemos como una pantalla que nos impide ver todo el dolor que somos capaces de causar . Nosotros seguimos tan frescos, sin darnos apenas cuenta de nada.
Un buen amigo de estos que surgen cuando menos te esperas se dió cuenta de lo que le pasaba a María. No hicieron falta palabras. Conocía su vida, sabía de que iba el tema. Le animó a compartir su sentir. Su experiencia. “No eres una marciana , aunque muchas veces lo creas”. Te ayudará el compartir tus experiencias dolorosas con otras personas. A todos nos marca el pasado que no es pefecto , pero sin él no llegaríamos jamás a entender muchas cosas. Por ejemplo a otras personas que pasan por lo mismo. Tu habrás aprendido a sentir ternura por el niño que sufre, por el que quiere sacar buenas notas pero el profesor ya le ha tachado de que “no sirve para estudiar” y se queda arrinconado sin nadie que le estimule, por el que no se siente querido porque sus padres ya tienen bastante con sus problemas. No te ocurren estas cosas sólo a tí, claro, duelen pero si las aceptas te convertirás en mejor persona y poco a poco esa tristeza irá desapareciendo. Vendrán recuerdos dolorosos ¡ claro ¡ el pasado no se puede borrar de un plumazo por más que nosotros lo intentemos . No te dejarán incapacitado para reaccionar. Tú misma te sorprenderás. Serán como un pequeño flash . Una minúscula anécdota ¡ Animo¡
María se animó a escribir su historia y a dedicarla a todas las personas que como ella no son perfectas. Se sintió feliz tranquila y relajada . Todo mi ternura para el ser humano que es capaz de resurgir de sus cenizas cual ave fénix. Os quiero.
Pseudónimo : María.
Maria Luisa Agost Suárez (lagost_66@hotmail.com)
Enviado el 1 de agosto del 2006
Escritos de Maria Luisa Agost Suárez:
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