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Porque este abrazador, e inquieto daño,
es un sentimiento, para mi tan extraño,
en el tiempo, es un vago y árido deseo,
sintiendo en el alma un gran desengaño.
Me elevaría cual raudo y blanco cometa,
en alas de mi amorosa y ardiente fantasía,
sin encontrar en mi camino los áridos abrojos,
arrebatando la calma a mi desolada mente.
Cuando salga del mundo a la región Eterna,
encontrare dudas mirando al azul Cielo,
buscando con ansia tú codiciado Don.
Yo le pido con fervor al mas Allá,
donde jamas existió la vanidad,
que cuando a ti a su seno te lleve,
juntos a los dos nos ha de llevar.
porque en esta tierra inhóspita,
donde tanta sin razón hay,
jamas podré vivir solo y a gusto,
sin tener a nadie en quien apoyarme.
Buscando la Gloria con apasionado amor,
en alas de mi infatigable Amor y fantasía,
solo la nada, encontró mi doliente corazón.
21 de marzo 2001
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Poemas de Jose Joaquin Muñoz Castro:
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